Denominado El Quijote Car-Vic-Mar de Cuenca, -primera y segunda parte-. Consta de 259 hojas numeradas y firmadas, tamaño cartulina, 65 por 50 cms., pintadas por los dos lados. Ha sido realizado entre el 2 de marzo del 2005 y el 27 de noviembre del 2005. Tiene tapas un poco mayores. Se encuentra en donación en el Museo de Cuenca. Autor de las pinturas JMM.
Según los datos que dispongo esta obra fue expuesta en la Sala Princesa Zaida del Museo de Cuenca en junio 2016, a raíz de unas conferencias o jornadas sobre el Quijote.
– Este libro o libro miniado o ilustrado o pintado como los medievales, pero con estilos actuales, cada página pintada con un dibujo-pintura original, aunque los textos del Quijote son hojas de la inmortal obra. Es un intento de hoy y en hoy, de intentar continuar con esos libros medievales, que eran únicos, porque no existía la imprenta, y que cada página, sus dibujos eran originales. Ahora, podría ser una de las variedades del libro de artista.
Fue un intento de aunar el amor a la literatura, el amor al Quijote, el amor a la pintura y al arte plástico, el amor al arte actual, y combinar todos esos elementos con variables filosóficas y metafísicas. De ahí, que surgiese una obra “única”, que completase y complementase todos esos factores y esas interrelaciones. Se crearán puentes de conexión entre todas esas islas, para de alguna manera, buscar grados de verdad-bondad-belleza en la racionalidad y en la emocionabilidad humana.
Ya, hace tiempo, casi quince años que se terminó dicha obra. Como todo lo que hace el ser humano, cuándo se deja, como barco en la mar, lleva sus derroteros y su destino, se independiza del autor, y no sé qué mares o costas habrá arribado, y a qué ojos habrá tocado en sus carnes-mente o alma. Pero esta obra, a mi modesto entender, tiene valor, no por el autor o la firma, sino en ella misma y desde ella misma.
Podríamos analizar-matizar-meditar- pensar, sin orgullo y vanidad y sin soberbia, estas páginas del Quijote y combinarlas con esas pinturas y colores.
No son ilustraciones al estilo clásico, sea con un estilo o sea con otro, sino que son “autocreaciones o recreaciones”, o dicho de otro modo, llevar esas historias un poco más allá o más acá. Es un intento de llegar al corazón del ser humano, a su carne y cuerpo, a su psique y mente, a su alma y espíritu. Para intentar, consolar y sosegar y también, que cada ser humano se haga preguntas.
– Esta producción cultural, además de ser un libro, aunque sea un poco grande, además de ser uno de los libros del Quijote más grandes en tamaño del mundo, hasta donde conocemos, y uno de los libros de todas las temáticas de más tamaño en el mundo, quizás, uno de los treinta. Además de todo ello, está realizado bajo la teorización de los Manifiestos Artísticos del autor. Que entre otros, esta obra es un libro-cuadro-mural.
Es decir, si cada hoja se pusiese una al lado de otra, como un mural, entre metacrilato, para verse por los dos lados, lo primero, que observaríamos es que tiene un tamaño similar al Juicio Final de Miguel Ángel. Quizás, de ese modo, los espectadores de esta obra, verían otras manifestaciones, otras realidades perceptivas y contemplativas de significante y de significado. Es más, si se aplicase uno de los Manifiestos Artísticos, que antes he indicado, véase dicho libro o dicho artículo, se podría colocar cada hoja en distinto orden, de distinta forma, por lo cual, surgirían potencialmente, millones de cuadros posibles.
Podríamos desarrollar aún más otras ideas, que lleva implícita esta obra. ¡Pero, el hombre es carne, aunque no solo carne, y el artículo periodístico tiene una limitación de palabras…!
– He indicado varias veces, reitero y repito, que de los nueve o diez Quijotes más grandes en tamaño existentes en el mundo, que este autor conoce, todos menos uno están o deberían estar en colecciones o museos o fundaciones de la Mancha, menos uno, que debe de estar o debería estar en Castilla y León.
Me pregunto, si la iniciativa pública y privada, podría hacer con ello, algún uso cultural, alguna exposición itinerante, alguna exhibición en alguno de los museos dónde está alguno conservándose… En cierto modo, han pasado dos grandes efemérides sobre el Quijote y sobre Cervantes, en estos últimos lustros. Y quizás, estas obras, que el tamaño, no es lo esencial, pero hoy, todo el mundo valora mucho las marcas. Quizás, se podría haber difundido la riqueza cultural que disponemos, en estas tierras con estas obras. Algo que quizás, no exista en otros lugares, hasta dónde sabemos y dónde conocemos. Dejo el guante. Paz y bien…
http://youtube.com/jmmcaminero
Fin artículo 2.147º: “El Quijote de Cuenca”.